Uuuuu igual depende. Mi última polola al inicio era una persona muy amable, pero con el pasar de los días se fue volviendo una relación super tóxica que duró sólo 3 meses, pero se sintió eterna.
Fue con una amiga que tenía como unos 21 años. Digámosle
Feña.
En diciembre del año pasado, durante el velorio de mi abuelo le pedí internet a papá para revisar una cosa, y noté que en el inbox tenía un mensaje de un tipo al cual yo no conocía, en el cual contaba que la Feña mandó un video a un grupo de wsp la noche anterior, donde ella aparecía teniendo sexo con un tipo.
¿Lo cuático? El mensaje del cabro lo adjuntó junto al susodicho video, y reconocí la cara del weón. Resulta que era un híbrido flaite/emo del cual la Feña me hablaba de forma frecuente, y la fecha en la que lo conoció coincidía más o menos con la semana en la que su actitud hacia mí empezó a cambiar.
La bloqueé de todo y me fui del velorio sin despedirme de nadie. Todos andaban relativamente de buen humor en ese momento, así que no quise cagarles el ambiente.
En el tiempo que llevábamos juntos, nunca me dio un beso, ni siquiera un abrazo. Al inicio, cada vez que ella misma sugería esa idea, cuando estábamos a punto de hacer alguna de las 2 cosas sólo se retractaba y pedía perdón, con lo cual yo no tenía problema alguno. Pero luego del cambio de actitud, le daba la weá y me sacaba la chucha justificando que era
porque le daba vergüenza. Usualmente acompañaba dichas sacadas de chucha con insultos y palabras como
degenerado,
gay,
enfermo, etcétera. Osea qué cresta.
Lo peor era que me golpeaba en público, y ni siquiera podía defenderme de vuelta porque más de alguien podría malinterpretar la situación, y el hecho de que la cabra era medio victimista y mitómana no ayudaba en absoluto. También, constantemente desquitaba su enojo conmigo, tapándome en insultos y amenazas de diversos tipos.
Es primera vez que le cuento esto a alguien.
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